Santo Domingo.-Por primera vez en la historia reciente de las relaciones entre República Dominicana y Estados Unidos, un alto funcionario del Gobierno de Estados Unidos reconoce el impacto que representa la crisis de Haití para el país en términos de seguridad y presión migratoria.
Así se evidenció la semana pasada durante visita del secretario de Estado, Antony Blinken, quien aseguró que la inestabilidad que presenta el vecino país no sólo afecta a República Dominicana, sino que repercute en todo el hemisferio occidental.
En la rueda de prensa junto al presidente Luis Abinader el pasado viernes, el funcionario norteamericano se comprometió a seguir trabajando para que Haití “sea exitoso”.
“El tema de Haití es un reto muy complicado porque se trata de asuntos que se remontan a muchos años, son problemas muy arraigados”, dijo el secretario Blinken.
El secretario de Estado agradeció al presidente Abinader los esfuerzos para ayudar a mejorar la situación en Haití, la cual calificó como una responsabilidad colectiva, al tiempo que resaltó que los Estados Unidos son un aliado permanente para la toma de decisiones en favor de ambos países.