Recursos a partidos a través de JCE ha creado negocios

En 1994 tuvieron lugar elecciones en las cuales los principales candidatos fueron Joaquín Balaguer, José Francisco Peña Gómez y Juan Bosch.

Desde temprano el día del sufragio se hizo evidente que los reformistas habían cometido fraude al adulterar las listas de votantes en una cantidad de comunidades repartidas por el país. Los resultados preliminares daban una muy apretada ventaja de Balaguer de un 43% contra un 41% de Peña Gómez.

Pronto comenzaron las denuncias internacionales tanto del National Democratic Institute (NDI) que había enviado observadores, del departamento de Estado y en el Comité de Relaciones Hemisféricos del Senado norteamericano tuvieron lugar vistas públicas.

Pero ese tranque coincidió con la decisión, tanto de Naciones Unidas como de la administración del presidente Clinton, de establecer sanciones económicas contra el régimen del general haitiano Raoul Cedrás buscando lograr el retorno al poder de Jean Bertrand Aristide. Al Balaguer permitir que se exportaran a Haití gasolina y otros productos se violaban esas sanciones y se dificultaba el propósito de Clinton.

Pronto un grupo de balagueristas y luego uno de perredeístas fueron a Washington a cabildear. El observador electoral de la OEA en Santo Domingo, el embajador canadiense John W. Graham, actuó como mediador junto a monseñor Agripino Núñez Collado.

El tema del fraude fue tratado por representantes del PRD en la reunión de la OEA en Belem, Brasil y pronto surgieron sugerencias de que se celebraran nuevas elecciones parciales en los lugares donde se había detectado el fraude.

By Bimary De jesus

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