El restaurante Casa Brava fue el lugar elegido para recibir a Patricia y María Balbás, herederas de la séptima generación de Bodegas Balbás, donde se preparó una cena que más que una degustación se convirtió en un viaje en el tiempo, que transportó a los comensales por una ruta cargada de historia y la pasión de una de las bodegas fundadoras de la Denominación de Origen Ribera del Duero.
La Bodega de Manuel González Cuesta como anfitriona de la noche, brindó a un selecto grupo de invitados la oportunidad de conectar con el alma de un linaje dedicado a la excelencia vitivinícola desde 1777.
Bodegas Balbás, además de ser una de las más una de antiguas de España, es un testimonio viviente de seis generaciones comprometidas con el arte de crear vinos excepcionales, según explica un material de prensa.