Con la elección de Donald Trump y el fortalecimiento de sus políticas proteccionistas, la República Dominicana enfrenta un momento crucial en el panorama del comercio internacional, de acuerdo al dirigente del PLD, Juan Ariel Jiménez.
Jiménez explicó que «este contexto representa una oportunidad histórica para nuestro país de convertirse en un destino clave para el nearshoring, el fenómeno de relocalización de empresas hacia países aliados y cercanos a Estados Unidos».
El ex ministro de economía explicó que aunque México fue el gran ganador durante la primera etapa de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, la situación ha cambiado señalando que reformas internas en México, como el aumento de costos laborales y la incertidumbre en materia de seguridad jurídica, han debilitado su atractivo.
“Este vacío genera nuevas oportunidades para países como República Dominicana y Costa Rica, con características ideales para recibir la segunda ola del nearshoring que se avecina en la etapa «Trump 2.0», dijo.